Ajo: 4 Consejos de conservación
En Ferroice sabemos cómo conservar el ajo en nuestras cámaras de conservación, ya que somos una de las empresas con mayor capacidad en cuanto a volumen de almacenamiento de productos agrícolas en frío totalmente regulado en España.
Nuestro objetivo y misión principal es conservar los productos agrícolas de nuestros clientes, pero también, ponemos nuestro foco y trabajo diario para que nuestros clientes, una vez de vuelta el ajo a la cadena alimentaria, puedan servirlos con la mayor calidad hasta la mesa del consumidor final.
En el artículo de hoy, queríamos trasladaros estos 4 consejos, para que este producto agrícola –el ajo– pueda mantenerse en casa, casi como el primer día después de su recolección.
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El ajo que se compra en ristras, el mejor consejo que os podemos ofrecer para que no se seque y se conserve en buen estado, es colgar estas cerca de alguna fuente de calor: suelen colgarse cerca de la cocina de uso cotidiano o en un lugar de la casa, donde haya un flujo de aire caliente.
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Cuando el ajo se compra por cabezas sueltas y estás se quieren mantener por un período de tiempo, para este caso recomendamos un lugar fresco, seco, oscuro y bien ventilado.
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Para las ocasiones en las que elegís guardar los dientes sueltos, pero sin pelar, lo más recomendable es seguir el paso anterior, pero guardando los dientes de ajo en un recipiente con orificios.
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Y como cuarto consejo: si por preferencia, sois de guardar los dientes pelados, lo que aquí recomendamos, es introducir los dientes en una bolsa totalmente hermética y congelarlos, con esta acción, logramos mantener los ajos por largos periodos de tiempo, y así, podrán utilizarse cuando se requiera su uso en la cocina.
Desde Ferroice, esperamos que estos 4 consejos os sirvan de guía de uso en la conservación de este alimento tan necesario en la cocina mundial.